4 de mayo de 2009
Barios jugadores no mojan la camiseta
El final del torneo se está volviendo un verdadero drama para Juventus, que arriesga echar a perder el excelente trabajo realizado a lo largo de toda la temporada: los jugadores están lejos de su mejor forma, todo el ambiente luce muy nervioso, el público contestó estruendosamente aún cuando el equipo estaba ganando y el entrenador toma decisiones por lo menos discutibles. Esta vez, Juventus empató como local ante Lecce: Haouliais Konan puso arriba a la visita, Pavel Nedved, con un doblete, dio vuelta al marcador y José Castillo, sobre la hora, fijó la igualdad definitiva. Con este resultado, Juventus suma 66 puntos en la tercera posición, mientras que Lecce está anteúltimo con 28, a sólo dos unidades del umbral de la permanenecia, los 30 puntos de Torino. Decíamos de las discutibles decisiones del entrenador: Juventus bajó a la cancha con Nedved y Camoranesi aleros, Del Piero enganche, una pareja ofensiva formada por Iaquinta y Amaurí y el solo Zanetti en la tarea de contención en el medio. Con este conformación, el equipo chocó tozudamente contra la atenta defensa de Lecce, coleccionando apenas una serie de tiros de esquina. En cambio, Giacomazzi armó muy bien una contra, conduciendo el balón por el corredor central y metiendo el cucchillazo para Konan, lanzado por izquierda en sospecha posición de off side (las imagenes televisivas demostraron que el atacante estaba efectivamente adelantado): el delantero definió muy bien de zurda sobre la salida de Buffón. Juventus trató de reaccionar, pero la única chance real fue un tiro libre de Del Piero, desde su "baldosa" preferida, que chocó contra el poste a la derecha del arquero visitante, quien de todas maneras pareció estar en la trayectoria del balón. En la segunda etapa Ranieri cambió, con el ingreso de Poulsen por Del Piero y Marchionni por Camoranesi, aún muy lejos de su mejor condición, pero el nuevo esquema táctico no modificó sustancialmente las cosas. Sin embargo, apareció el orgullo de los campeones, en este caso de Nedved. El checo, por lejos la figura de la cancha, se puso el equipo al hombro y dio vuelta al marcador con dos zurdazos. En el primer caso Amaurí, desde el punto del penal, la tocó hacia atrás para el ingreso a la carrera del rubio volante, en el segundo la asistencia fue de Marchionni y hubo algo de complicidad por parte del arquero Benussi, quien alcanzó a tocar el remate sin poderlo desviar a suficiencia. En el medio, Iaquinta había tenido una buena chance, pero en ese caso la salida de Benussi fue perfecta. Sin embargo, Juventus no está bien físicamente y sufrió el embiste desesperado de Lecce que, perdido por perdido, se lanzó hacia adelante con todo, entre los silbidos del público local, que contestaba duramente a su propio equipo. Poulsen salvó sobre la línea de sentencia en ocasión de un remate de Fabiano, Buffón se superó para rechazar un disparo de Tiribocchi pero, en tiempo de descuento, el mismo Tiribocchi metió el centro desde la izquierda y Castillo, dejado absolutamente solo por De Ceglie, en zambullida cabeceó al gol, provocando protestas aún más encendidas por parte de la parcialidad local.
Etiquetas:
blogs.edicion
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario